domingo, 28 de noviembre de 2010

7 días para Lisboa y bajando.


Menos de una semana para Lisboa y ya empieza el gusanillo a rondar el estómago, ya siento el come-come típico de antes del maratón y la verdad me encanta.

Solo me quedan 2 salidas cortas esta semana para el domingo disfrutar o sufrir los 42 kilómetros. Físicamente llego bastante bien, sin lesiones en la preparación, corriendo más rápido que nunca y durante más tiempo. Sin embargo esta vez le tengo miedo a lo psicológico, al parecer el recorrido sobre todo al principio es bastante feo y con viento puede ser muy pero que muy feo, luego cuando la cosa se pone bonita también se pone cuesta arriba y si a todo esto lo unimos que la organización es muy mala hasta me preocupa perderme durante el recorrido.

Total que voy  concienciado para todo pero con muchas ganas de estar en la salida y sobre todo de un rato después estar en la meta.

viernes, 12 de noviembre de 2010

¡Ay omá qué hambre!

Estas dos semanas estoy haciendo más kilómetros que un Simca 1000 y sinceramente estoy deseando no tener que correr una media maratón nocturna o algo parecido después de estar todo el día trabajando.


Además y lo que es muchísimo peor a esas horas que ya voy con un hambre de perro de ciego la gente no se le ocurre otra cosa que preparar la cena (torturadores) y claro esos olorcillos que si a tortilla de patatas,que si a filete, que si a churrasco son una tortura para mí. Lo peor es en una zona de restaurantes que allí ya es para verme la cara, ¡Qué explosión de sensaciones! Parezco el oso Yogui ese siguiendo el rastro de las cestillas de los campistas.




Pero eso sí, cuando la situación se vuelve insostenible y el estómago anda loco de la vida es el momento de correr un ratillo por la zona de la depuradora de agua que oler huele a ostias pero por lo menos me quita momentaneamente el hambre.



 Lo que hay que hacer.

lunes, 8 de noviembre de 2010

En vez de perrear....... a correr.




Como había previsto la tirada larga del sábado me costó un huevo y de los de bicho grande. Como trabajo por la mañana y el domingo tenía todo el día ocupado me tocaba ponerme a ello el Saturday post-siesta. ¡¡¡¡Qué pereza!!!

Después de comer me tumbé un ratillo a dormitar y a las 5 ya estaba en la carretera con muy pocas ganas, como sabía que me iba a pillar la noche (normal a la velocidad que iba) tenía que organizar el recorrido para que la segunda parte se desarrollara por zonas con luz por razones lógicas que supongo no hace falta explicar.


Últimamente solo leo que el Maratón de Lisboa es muy duro así que me preparé un recorrido exigente con subidas y bajadas ya desde el principio, fue el momento en que me di cuente de que soy dañino hasta para mí mismo, pedazo de cuestas, si es que es para no hablarse en un tiempo.

Al final fueron 27km que recorrí bastante más lento de lo que preveía y que otras veces. Como no llevaba agua conmigo tuve que parar en alguna fuente a beber y refrescarme, eso creo que hizo que el ritmo medio empeorara un poco.

Comparado con la preparación del Mapoma parece que estoy algo más lento pero sin embargo creo que estoy haciendo más kilómetros.

Solo me queda la tirada larga de este Domingo y después empezar a bajar kilometraje hasta el día D.

Que llegue ya por Dios.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Seguimos en la lucha.



Buenas a todos de nuevo, vuelvo después de un pequeño tiempo de numerosos compromisos y actividades varias que me han impedido escribir una línea en el blog y participar en la pedestre de Santiago de Compostela entre otras muchas cosas. Pero como lo importante es el ahora, empezamos:

Este sábado me espera una de las dos tiradas largas que me quedan, 29-30 km que voy a meter en las piernas y viendo lo que me está costando acabar cuando tocan muchos kilómetros me parece que va a ser una buena preparación mental para el maratón.

Tengo preparadas todas las frases positivas para animarme que he encontrado, estoy mentalizado para tanto tiempo corriendo y con la lección aprendida de que en un entreno largo hay momento buenos, malos, regulares. Es curioso como en un momento parece que no puedes dar un paso más y cinco minutos después sentir que puedes correr todo el día si hace falta.

En fin misterios del cuerpo, este Sábado otra oportunidad para intentar desentrañarlos un poquito y de paso vivir un ratillo lleno de sensaciones.

Dios me coja confesado.